Hoy en día, cada vez más familias de término medio, se deciden por instalar Termas Solares, porque ya saben o tienen en cuenta que el calentamiento de agua, ocupa el tercer lugar en gastos de energía, más aún en negocios y empresa, es un gran desembolso económico para todos los sectores, verdad?.
Bueno, en este posts veremos ¿qué son las termas solares y cómo funcionan? Entonces, aquí vamos a por ello…
Sabemos, que utilizan la energía calorífica que proporciona los rayos solares para calentar el agua, y esta es la razón de una solución de gran eficiencia energética.
Los tipos de termas solares están orientados a uso doméstico o industrial, por varias ventajas y pues la eficiencia energética de estos sistemas es su bajo coste de mantenimiento y su alta durabilidad, permitiendo así el retorno de la inversión a muy corto plazo.
¿Qué son las termas solares?
Las termas solares son un sistema de almacenamiento de energía solar que utiliza la radiación solar para generar calor.
Estos sistemas son una alternativa más sostenible y económica a los sistemas de calefacción de agua convencionales, que utilizan combustibles fósiles como gas o electricidad.
Estos sistemas están compuestos por paneles solares, los cuales absorben la radiación solar y la transforman en energía térmica.
Esta energía térmica se guarda en un tanque de almacenamiento de agua, el cual se encarga de calentar el agua y mantenerla a una temperatura constante.
Estos sistemas son muy eficientes y ahorradores, ya que al no depender de combustibles fósiles para su funcionamiento, permiten a sus usuarios ahorrar una gran cantidad de dinero en facturas de energía.
Además, las termas solares son una opción sostenible y económica para calentar agua en hogares, empresas y comunidades. Además de ser amigables con el medio ambiente, pueden reducir significativamente los costos de energía y ayudar a disminuir la dependencia de los combustibles fósiles.
¿Cómo funcionan las Termas Solares?
Las termas solares funcionan de por sí de una manera barata y efectiva gracias al sol.
Entonces, sabemos que mediante la captación de la energía solar, calentamos el agua. Esto se logra a través de un juego o conjunto de colectores solares, paneles planos o tubos de vacío que están diseñados para absorber la energía solar y convertirla en calor.
Estos paneles se montan en el techo o en un lugar donde puedan recibir la mayor cantidad de luz solar posible. El agua fría que se va a calentar se bombea a través de los colectores solares y se calienta a medida que pasa por ellos.
Estos colectores captan la radiación solar y la transforman en energía térmica, que luego se guardan en un tanque de agua ubicado en el interior de la casa.
El tanque de almacenamiento está aislado para mantener el agua caliente durante períodos prolongados. La mayoría de los tanques de almacenamiento también tienen una resistencia eléctrica de respaldo para calentar el agua si es necesario.
Las tuberías conectan los colectores solares con el tanque de almacenamiento y la casa. El agua caliente se bombea desde el tanque de almacenamiento a la casa cuando se necesita agua caliente. El agua fría se bombea de regreso al tanque de almacenamiento para su calentamiento posterior.
Las termas solares también son capaces de calentar el agua durante la noche, gracias a la energía térmica almacenada en el tanque.
Además, hay algunos modelos de termas solares, como las termas solares presurizadas planas integradas, que pueden proporcionar agua caliente a presión, lo que permite un mejor control de la temperatura del agua.
En resumen, las termas solares funcionan al utilizar los colectores solares para absorber la energía solar y convertirla en calor para calentar el agua. El agua caliente se almacena en un tanque de almacenamiento y se utiliza en la casa según sea necesario.
¿Las Termas Solares deben ser de acero inoxidable?
Las termas solares pueden estar hechas de diferentes materiales, aunque el acero inoxidable es una opción común debido a su durabilidad y resistencia a la corrosión. Sin embargo, también se utilizan otros materiales, como plástico reforzado con fibra de vidrio, cobre, vidrio y acero al carbono.
El tipo de material utilizado en la construcción de las termas solares puede variar según la ubicación geográfica, el clima y la disponibilidad de materiales. Por ejemplo, en zonas costeras con alta salinidad en el aire, el acero inoxidable puede ser la mejor opción debido a su resistencia a la corrosión. En áreas donde la lluvia ácida es un problema, el plástico reforzado con fibra de vidrio puede ser una mejor opción.
La elección del material también puede depender del presupuesto y de la cantidad de agua que se necesita calentar.
El acero inoxidable, por ejemplo, es más costoso que otros materiales, pero es duradero y puede soportar mayores presiones. Los tanques de plástico reforzado con fibra de vidrio son menos costosos, pero pueden tener una vida útil más corta.
El acero inoxidable es una de las mejores opciones para un tanque de terma solar dado que es extremadamente resistente a la corrosión y a los daños causados por el sol, lo que ayudará a prolongar la vida útil del sistema.
Además, el acero inoxidable también es más higiénico que otros materiales, lo que significa que el agua no se contaminará.
Sin embargo, el acero inoxidable también es más caro que otros materiales, así que deberás considerar tu presupuesto antes de decidirte por él.
En resumen, aunque el acero inoxidable es una opción común para la construcción de termas solares debido a su durabilidad y resistencia a la corrosión, también existen otras opciones, como plástico reforzado con fibra de vidrio, cobre, vidrio y acero al carbono, que pueden ser más adecuadas dependiendo de la ubicación geográfica, el clima y la disponibilidad de materiales.
